domingo, 3 de febrero de 2013

SOLEDAD



Soledad resuella cuantas veces me acompañas
En las noches de conquistas frías y lejanas,
No tienes cara, ni cuerpo ni delicadeza
¡Ingrata! solo te haces sentir con la tristeza

Daga de ecos impío ¡Oh Quiero ver a mi amado¡
Con reflejos contemplo su lunar alumbrado;
Illuminati  noches y efímeras me empaña
Alentándome siempre con un nuevo mañana.

Contemplo tus lagrimas caer por la ventana
Noches de luna llena  y soledad aturdida
Rezando que resurja ya, tan ansiada vida.

Con mis respiraciones eclipso la ventana
Y luego la luna resurge brillando y tercia
Aclarando siempre tu imagen en mi memoria.
AUTOR: NORMA CECILIA ACOSTA MANZANARES
CARACAS, 03 DE FEBRERO DEL 2013.

A TI HERMANO


Hermano de mi alma compañeros de recreo
También de birras e insuperables bailoteo
Tus venas mi sangre, facsímil de nuestro padre
Los ojos llenos y devotos de nuestra madre.

Recuerdo de niños con juegos inmemorables
Y esas películas que siempre te vacilabas
! La serie del avispón verde! fue muy loable
Y con creativa, tus juguetes yo rayaba.

De aquellas ocurrencias colmadas de inocencia
Recuerdas el juego, quien comía más cambures
Y aquel dolor de estómagos que nos producía.

Hoy en tu aniversario colmado de madures,
Agradecida estoy de contar siempre contigo
No eres solo mi hermanito, eres un buen amigo.
Autor: Norma Cecilia Acosta Manzanares.
Caracas, 29 de Enero del 2013.

Soneto de Ternuras y Cristales





Soneto inspirado en el poema “Tazas de Cristales”
A: Marcantonio De Oliveira


El amor que dosifica esas tazas de flora
Aromáticas y relajante a la existencia
Con regocijo brillantes que impregna la aurora
Realzando la poesía con su presencia.

Manos de ternuras adormecen  la cintura
Calmándola en suave calor y alivio de seda
Dosis de alquimia curan las heridas del cuerpo
Con manos de jardinero y almizcle de rosas.

Profesar en tus ojos cristalinos la luna
Y  erguir la gloria cuan fiesta de quinceañeros
Llenándolos con ricas finezas de luceros.

Brindando con tu alma cristalina de fragancia
Se escucha la noche colmada de melodía
Llenando la copa de lirio y brillo de luna.

Autor: Norma Cecilia Acosta Manzanares.
Caracas, 27 de Enero del 2013.

OBRA DE TEATRO LAS HOJAS SUELTAS


PERSONAJES

- **LA MADRE**
- **JESÚS**
- **LA MUERTE**

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ACTO PRIMERO

(Un árbol con hojas amarillentas se erige en el centro de un jardín desolado. Un gran jarrón de arcilla, con pocas flores marchitas, está a su lado. JESÚS aparece, toma una flor del árbol y, al intentar bajar, se resbala. LA MADRE lo observa con preocupación.)

**JESÚS**  
(Se levanta y se acerca a su madre)  
Madre.

**MADRE**  
¿Estás bien?

**JESÚS**  
Sí, estoy bien, pero debo irme.

**MADRE**  
¿Te vas? ¿A dónde?

**JESÚS**  
No lo sé... algo no está bien.

**MADRE**  
(Con mirada profunda)  
¿Qué harás? ¡Tengo miedo, hijo!

**JESÚS**  
(Con voz triste)  
Iré a rezar por ti.

**MADRE**  
(El árbol suelta hojas que caen sobre ella, simbolizando el paso deltiempo)  
¡Deseo que descanses en paz! ¡Vete, vete ya!  
Mañana será lo mismo.

**JESÚS**  
(Con las manos en la cabeza, moviéndolas de lado a lado)  
¡Qué nos pasa!

**MADRE**  
(Con voz lejana)  
Si yo naciera de nuevo...  
Y tuviera que vivir esta condena,  
Ver morir a tu padre sin que tú nacieras...  
Lo dejaría partir.  
¡No es justo verte así!  
Amamantar con tristeza,  
Debí darte más alegría que pena.

**JESÚS**  
(Se arrodilla ante ella, recogiendo las hojas del suelo)  
Yo nací en tu vientre, soñando con el mar.  
Mientras me alimentabas,  
Mi mente volaba como una estrella.  
Tú nadabas entre hojas sueltas,  
Y yo pensaba en la belleza de la arena,  
Haciendo castillos de perlas  
Para calmar la tristeza.

**MADRE**  
(Reclinándose en la sombra del árbol, piensa en voz alta)  
¿Puedes darme paz?  
Estoy atada a este recuerdo,  
Peor que el exilio...  
¡Vete ya! ¿Mañana volverás?  
¡Ruego que no!  
Solo al verte me entristezco.  
Quizá me estoy volviendo loca,  
Y tú, sin querer abandonarme,  
Y yo, sin dejarte ir.

**JESÚS**  
(Con voz fuerte al inicio, luego pausada)  
¿Qué piensas de mí?  
¿Es un pecado seguir aquí?  
¿Temes a la pena?  
Desearía que dejaras de sufrir.  

Deja la pena y descansa serena.  
Te llenaría de nardos blancos,  
También te daría una azucena,  
Brillando como nácar en la luna,  
Para calmar tu tristeza.

**MADRE**  
(Con profundo silencio, se aparta de la mirada de Jesús)  
Solo las hojas sueltas danzan con el viento.

**JESÚS**  
(Mirando la noche profunda, se acerca al árbol y recita un soneto)  
Siempre eres tú, viejo amigo,  
Recuerdo cuando llegaste a mis manos,  
Eras el guardián de este jardín,  
Que ahora está desolado y triste.

SONETO DEL ÁRBOL

Dócil árbol que en el viento danzabas,  
con tus ramas me brindabas compañía,  
en la infancia, mi refugio y alegría,  
en tus hojas, mis sueños se posaban.  

Eras sombra en días que anhelaba,  
centinela de mi infancia y armonía,  
en tu tronco hallé paz y fantasía,  
y en tu ser, la vida que amaba.  

Hoy tus hojas caen, un ciclo que duele,  
el tiempo lleva consigo lo amado,  
y en el suelo se apilan los recuerdos.  

Mas en cada caída, el alma se eleve,  
pues aunque el otoño haya llegado,  
tu esencia perdura en mis pensamientos.

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ACTO SEGUNDO

(El árbol deja caer más hojas amarillas. A un lado, un santuario lleno de luz se destaca.)

**JESÚS**  
(Se arrodilla y exclama con fervor)  
¡Tenía miedo de no hallarte, Gloria!  
Y no poder ver tu luz de alegría,  
Las amarillas hojas enardecidas,  
Con mejillas plenas y coloridas.  

El miedo de no oírte más cantar,  
La dócil voz que con el viento trina,  
Apacible onda de ave bizantina,  
Llena el sueño, alientas mi despertar.  

Bendita flor, tu belleza me doma,  
Con suave alabanza del peregrino,  
Tan especial, la joya del camino.  
Eres el alma de nácar y aroma,  
Como guerrero de luz y victoria,  
Danzando en laurel por amarte, Gloria.

**MADRE**  
(Se acerca al santuario, entristecida)  
Busco revivir en tus recuerdos, hijo.  
Hoy desperté sin tristeza,  
Pero sufro tu partida.  
Déjame ser franca:  
Me dejas sin alegrías.  
No tengo la esperanza perdida,  
De tras de ti se fue mi vida.  

Te arrullé en la cuna de mi vientre,  
Te parí con dolor,  
Y tú, ya nacido, buscabas puerto.  
Ahora te recuerdo con amor.  
Si llorar quiero,  
Arropada muero por tu amor.  

El día que muera será de otoño,  
Tendré luz en el alma de mi hijo.  
El árbol florecerá con ansia,  
En el invierno de sus ojos.  
El asilo con flores de loto,  
La primavera se colmará de cobijo.  
El recuerdo de mi risa jovial,  
Con las flores, los epitafios se adornarán.

**JESÚS**  
(Vuelve la mirada y se da cuenta de que su madre está en el santuario)  
¿Madre, qué haces aquí?

**MADRE**  
Nunca Dios te ha abandonado.  
Deja que el árbol enverdezca  
Y no cuentes las hojas sueltas.

**JESÚS**  
¿Sería mucho pedir que me abraces?  
Eso es lo que quiero,  
Y de ti siento lo mismo.  
Nos dará fortaleza.  
Tú serás siempre mi madre,  
Yo siempre te tendré presente.

**MADRE**  
(Entristecida, exclama mirando al cielo)  
Oh, Dios, solo harás el milagro  
De sentir tu calor en mi memoria.  
Rezar solo me queda  
Para no volverme loca.  
Oh, Gloria santísima,  
Que siempre me escuchas,  
Devuélveme a mi hijo.  
Mi alegría es solo suya...

**JESÚS**  
(Con ojos tristes y voz frágil)  
Abrázame, madre,  
Que yo también tengo brazos dulces para ti.

**LA MUERTE**  
(Aparece en el santuario y camina hacia ellos, se escucha música suave, un violonchelo que acompaña el momento.)
Cuando cambias la forma de ver las cosas,  
las cosas cambian de forma.

**MADRE**  
¡Oh, ya es hora!

**JESÚS**  
Madre, no te asustes.  
Es un ángel.  
Ya es hora de que partas.

**MADRE**  
¿Partir yo? ¿Cómo?  
¡No estoy lista!

**LA MUERTE**  
He venido a buscarlos.  
Ustedes ya no pertenecen a este mundo.  
Ambos dejaron sus cuerpos  
Y ahora son almas perdidas.  
Ya saben por qué estoy aquí,  
En este santuario lleno de luz.

**JESÚS**  
(Confundido, camina de un lado a otro)  
¿Qué dices?  
¿Yo también he muerto?  
¿Cómo fue? No lo recuerdo.

**MADRE**  
(Sentada, exclama con voz angustiada)  
Hijo, he rezado para que descanses en paz.  
¡Y de mí, no sé qué me pasó!

**LA MUERTE**  
(Responde con voz persuasiva)  
SONETO AL EPITAFIO

En aquel árbol, la flor se cortó,  
para la madre que adoraba en vida.  
Él solo pretendía erradicar su pena,  
enalteciendo su esencia, su fragor.  

Los cuerpos perduran bajo el epitafio,  
donde el amor eterno nunca se olvida.  
Aquí reposan los sueños que el tiempo  
no puede borrar, su luz no se apaga.  

Las hojas caen, susurros del pasado,  
y en cada caída, un eco de amor,  
sus almas se aferran a la memoria.  

En este lugar, el silencio es sagrado,  
donde el dolor se encuentra con el clamor,  
y el amor trasciende más allá de la historia.

**MADRE**  
(Se acerca a su hijo, las luces cambian a un tono cálido mientras se abrazan.)
SONETO DEL ABRAZO

Tus abrazos son refugio y consuelo,  
un bálsamo que calma mis temores,  
como el sol que despierta los colores  
en la sombra, donde hallo mi anhelo.  

Eres la luz que disipa el desvelo,  
la melodía que canta en mis flores,  
un lazo fuerte que une corazones,  
y en tu calor, mi tristeza se apela.  

Cuando el mundo se vuelve un laberinto,  
en tus brazos encuentro la salida,  
un espacio donde el alma respira.  

Así, en cada abrazo, un nuevo rito,  
te llevo en mi ser, madre querida,  
nuestros lazos son eternos, sin medida.

**LA MUERTE**
(Observando)
El ciclo nunca termina, solo se transforma.(El jardín comienza a cambiar visualmente, las flores marchitan, pero aún hay destellos de luz.)

**MADRE**
(Con voz reflexiva)
Verte a ti es ver el campo lleno de paz.
(Se separa lentamente)
Es hora, hijo.

**JESÚS**
(Mirando al público)
¿Alguna vez se han sentido atrapados entre dos mundos?
(La música se intensifica mientras JESÚS y LA MADRE se preparan para el adiós.)

**LA MUERTE**  
(Se acerca al público, con voz persuasiva)  
Solo las hojas sueltas danzan con el viento.
(Con voz serena mira a Jesús y le habla)
No hay que temer, hay un nuevo camino.
(Se vuelve hacia la madre)
El amor siempre perdura.
(Las luces se apagan lentamente, dejando un resplandor suave en el escenario.)

FIN

AUTOR: NORMA CECILIA ACOSTA MANZANARES
CARACAS, 26 de enero del 2013.



jueves, 3 de enero de 2013

YO BUSCO



Busco amor en mis poemas con tu compañía,
A un acompañante que me enamore con lira
Y con improvisación engalane  mi día
Para que nuestro amor se haga con la poesía.

Busco al amante perfecto lleno de energía
Me engalane con los besos dulces que suspira
Que acaricie mis manos en plena luz del día
Para sentirme amada de tanta poesía.

Te busco a ti para darnos bella compañía
Disfrutar de nuestros sentires con alegrías
Para tildar nuestro amor con bella simpatía.

 Buscarte ansío, besarnos con la cercanía
Para enlazar nuestros versos con amor, caricias
Y sentir el alba, llenándonos de armonía.
Autor: Norma Cecilia Acosta Manzanares.
Caracas, 03 de Enero del 2013
Etiquetas: Soneto

lunes, 24 de diciembre de 2012

RECONOCIMIENTO

El Portal Literario SVAI,
entrega el presente
RECONOCIMIENTO a
........................................................................
NORMA CECILIA ACOSTA MANZANARES
en la fiesta Homenaje al Poeta Virtual
por su excelente participación
con su texto
HOMENAJE AL POETA VIRTUAL
Octubre 31 de 2012


RECONOCIMIENTO


MENCIONES IMPORTANTES


POEMA DESTACADO, NAVIDAD CON LAS VIRGENES VENEZOLANAS



Virgen de la Chiquinquirá
La virgen esplendorosa
Del pueblo marabino,
Es la chinita inspiradora
De gaiteros y de niños.

Dulzura es tu sonrisa
Que iluminas al cielo
Dándole mucha gracia
A las mujeres de tu pueblo.

Tanto amor te profesan
Este pueblo zuliano
Y con el estruendo del cielo
Bendices al lago de Maracaibo.

Con oraciones devotas
Y mucho amor bendito
Celebran con bellas estrofas
La navidad de chuchito.

Miren el cielo marabino
Con pirotecnias del Catatumbo
Esa luz enaltece la presencia
De la ansiada paz zuliana.

Llegaste chinita en la tablita
Llena de humildad y esperanzas
Das amor y paz a este pueblo
Con tu mensaje de renacimiento.
LA VIRGEN DE COROMOTO

Con tu hermosa luz divina
Centelleaste al cacique
Y con su nombre lo bendeciste.
Virgen de la Coromoto
Patrona de mi Patria
La colmas de tanta belleza.
Madre guanareña
Nos bendices con tu hábito
De manantial cristalino.
Patroncita hermosa de mi tierra
Nos comulgas de esperanzas
Y paz para mi Venezuela.
Salve reina de mis aguas
Cristalinas y consagrada
La natividad de la esperanzas.
Virgen de la Coromoto
Llegaste para amarnos
Y protegernos en tu regazo.
Tan piadosa eres virgencita
Que nos proteges con tu manto
Y nos das significado a esta navidad.
VIRGEN DEL VALLE
Madrecita del pueblo margariteño
Realza con tu dorada luz
La perla brillante del Caribe.
Protectora de tu pueblo
Lo regocijas en tus senos
Dándole libertad y belleza.
El ñero a de siempre resaltar
El colorido de tu pueblo, lleno
De gamas naranjas devotas.
Pía madre beatísima
Lavaste a margarita
Con tu lágrima bendita.
Eres perla dorada y fina
Rodeada del mar místico
Venerable y amoroso.
Piadosa virgen que escuchas
El cantor de las aguas peregrinas
Del dominante Caribe
Virgen del valle con tu divina voz
Le cantes y lo arrulles en el morichal
La canción familiar de nuestra navidad.
VIRGEN DE BETANIA
Santísima cálida virgen
Madre reconciliadora
Umbral es tu santuario
Lleno de aromáticas rosas.
De la bruma saliste
Escoltadas de querubines
Vibrantes y sonoros
Llenos de luz y arrojos.
Virgen de Betania
Santísima madre María
Apareces cuando el sol baila,
Girando con tu energía.
Tus mensajes excelsos
Están llenos de poesía
Romper esas cadenas
Y llenarnos de armonía.
Virgen perfumada en rosas
Apareces con mensajes de paz
Haces que sangre la hostia
Recordando la vuelta de Cristo.
Testimonio de la presencia
De nuestro padre creador
Así es la permanente navidad
Que se fomentan en el corazón.
Virgen de Betania
Dulce compañía
Madre excelsa María
Celebre de paz y armonía.
La Divina Pastora
Coqueta virgen de sonrojadas mejillas
Venerada por el pueblo crepuscular
Das aliento a tus fieles devotos
Que con oraciones te piden paz.

Divina Pastora, madre conciliadora
Abres el camino para tus rebaños
De amor, paz, lealtad y bienestar
Cruzando en peregrinaje la esperanza.
El sol guaro aflórese cándido
A tu imagen de pureza y perfección,
Escoltando tu cantor divino
Como niño encandecido.
Virgen divina diáfana
A la gloria de Dios,
Con tigo Divina Pastora
Somos hijos de tu legión.
Bienaventurada Virgen María
Humilde madre flamante
De nosotros los larenses
Que te amamos en tu esencia.
Virgen de imagen sublime
Tu pueblo te viste de matices,
Reina eres, somos tu rebaño
Llévanos siempre con tu manto.
Virgen María madre de Jesús
Nos lavas con tus lágrimas
Quitando el impío orgullo
Y llevándonos a la renovación de la fe.
AUTOR: NORMA CECILIA ACOSTA MANZANARES.
CARACAS, 22/12/2012.

A GUADALUPE


Virgencita Morena,
Altisima eres, Madre
Del cielo y reina del universo
Por ti llueven los pétalos
Y sahumarías el aire
Mientras que el sol sale,
Santísima virgen María eres,
Abogada de la paz,
Humectas nuestras almas
Con amor de verdad.
A ti Virgen de la Guadalupe
Patrona de mis hermanos
México te eleva
Con el corazón en la mano.
Virgen adorada de rosas
Excelsas la Poesía
Con el rosario de la virgen María.
A ti Altisima te doy mi poema
Para que lo santifiques
De estas humildes palabras
A través de ti madre de las rosas
Te pido salud para mis hermanos.
Con amor y gratitud.
Norma Cecilia Acosta Manzanares.
Caracas, 23/12/2012

¿QUÉ NO SE HA DICHO? ©

 ¿QUÉ NO SE HA DICHO? © Todos los derechos reservados Autora: Norma Cecilia Acosta Manzanares País: Venezuela Tema: Día Internacional contra...