A TI MI REFUGIO
A Ti, Mi Refugio Oh, Dios, al despertar y no hallarte, siento que parte de mí se desvanece. Las palabras se enredan en mi garganta, el alma y el cuerpo se retuercen, como un eco de la vida misma. En este vaivén de lo humano, donde la tristeza y la alegría se entrelazan, me aferro a ti, mi refugio eterno, en la danza de lo incomprensible. Tu imagen es mi recuerdo sagrado, el tiempo compartido, un tesoro inmenso. pero el dolor aprieta mi alma, y me resigno a vivir sin tenerte físicamente. Así es el destino, así es la vida, nos brinda momentos de dicha y tristeza. Nadie escapa de esta dualidad, pero en ti hallo consuelo y esperanza. ¿Cuánto duele vivir sin alguien? Cuando se nos arrebata la esperanza, busco en ti, Dios, mi refugio constante, y dig...